Un año más se han unido esfuerzos e ilusión y se ha conseguido que el Nacimiento de Dios sea, en primer lugar, la Buena Noticia para todos, además de aglutinar una serie de valores que hacen que nuestros hijos “vivan” la Navidad de una forma diferente.
Sabemos que el trabajo es ímprobo y que se necesita mucho y mucha gente para que salga adelante, pero también es muy gratificante y a veces sorprendente. Ver como las familias se responsabilizan de que hay que echar una mano, que hay que colaborar, unas con horas otras con euros, cada una como puede pero al fin y al cabo conscientes de que merece la pena.
Los niños, el equipo de extraescolares, el propio Director son nuestros referentes. Ellos se vuelcan y nos arrastran a seguirlos. Muchas personas e instituciones que participan también los siguen. No perdamos la estrella.
